Cinco de Cinco: Recapitulación

I.

Conozco para donde va esto,

pero no dónde se puede

discernir el primer paso,

de dentro de todas las opciones disponibles.

Se origina en alguna parte

cerca al Oasis del corazón,

pero la vida interior de la mujer

es un continente construido

y ocurriendo naturalmente,

de espacio inmenso;

y aun placas continentales tienen

sus límites, sus debilidades-

líneas de falla. Lugares donde

se quiebran.

 

Siempre hemos deseado,

a nuestro nivel corporal

el viajero sin temor

de forjar nuevos senderos

por selva no-explorada.

Un lugar seguro encima de que

se puede romper abierto

el corazón de ella,

un lugar donde el acto de quebrar

es acto de fe,

en vez que violencia.

 

II.

Nuestros senderos son marcados

por la presencia de árboles magníficos.

Y qué son árboles,

sino historias de amor

escrito por la tierra firma

en alabanza de todo que el Cielo

tiene para ofrecer?

 

Hay cientos de maneras

para inscribir tu historia de amor

en tu cielo mismo

y lograr un Resultado Sublimo.

Solo pidas el roble.

 

Cada 600 especies de ellos.

III.

Nuestra propia historia no sera

escrito en orden cronológico.

El amor nunca fue destinado

para mantenerte en tu zona de comodidad.

Fue hecho para: alimentarte, desafiarte,

crecerte, y sostenerte. Para fracturarte

suavemente, ahogarte en incrementos

pequeños. Deriva contienentarte

entre Conciencia Pura.

 

Y estoy aprendiendo:

para tener la paciencia

de procesos geológicos. Mi sangre

se convierte en lava, mi respiración,

en ceniza, mi amor en eones;

a medidas del tiempo y movimiento

imperceptible en la mayoría

de los momentos humanos.

 

Aprendo de darte espacio;

la distancia entre:

dos puntos geográficos fijados,

atraídos por una zona de convergencia.

Inexorablemente, y con fricción,

vacilación, y puntos quedados;

considerables. Somos

tan materia de que fue hecho

la Tierra.

Mañana.

 

 

IV.

Y seando humano,

también reclamo la impaciencia de los rayos,

la percepción, dime hacia dónde vamos,

desde dónde viajamos,

dime simplemente como entenderte,

y dímelo, hoy.

 

Los rayos muchas veces se matan arboles

menores, pero quema y forma

el roble que es paciente, resiliente.

 

Yo abro, desplego en secuencia de Fibonacci-

No entre ti, pero quizás

por ti, por mi interpretación propia.

Tan válida que cualquiera cosa fuera,

tan verdadero que

mis propias consecuencias,

viajes emprendidos, inexorablemente

en busca de la experiencia

de mi propio corazón

de ser un nogal americano salvaje

dentro de un bosque de robles

majestuosos.

 

Es dicho que corazones se necesitan

quebrar, para que las palabras

sagradas y suaves caerían adentro.

 

V.

Desde el principio de conocerte,

has sido la luna a las mareas de

mi cuerpo. Fluidos en moción,

químicas pidiendo formación

de vida. Tengo continente vasto

y grande para ofrecerte; naciones

enteras de pensamiento, normas de

ley y anarquía, costa a costa. Y un

lugar tierno, Oasis,

mas seguro cada mes con

el conocimiento que el anhelo

nostálgico para un mar sobre saleado,

para flotarse sin esfuerzo…

 

no solo es anhelo

pero también memoria compartida.

Fuimos formados de polvo de estrella

y agua del mar, nacido entre

agujas y hojas y ramas de árboles.

Venimos para aprender, ensenar.

Quizás, Amar.

 

Favor, solo mantengas mi mano,

mientras que exploremos

masas terrestres. Siempre he sido

exactamente y justamente,

legítimamente; en noches obscuras

y sueños despiertos dulces-

tan específicamente aterrorizada

de las líneas de falla-

que tú.