Capítulo 4: Una Vuelta al Instituto

“¿Vamos a dar un paseo?“ preguntó Marvin con su sonrisa fácil y su mirada algo vidriosa.

“Eso sería genial, gracias”, dijo Dan levantándose. Marvin abrió el camino de regreso por el largo pasillo, esta vez deteniéndose en la última oficina a la izquierda justo antes del área de recepción. Un hombre barbudo con cabello castaño largo y delgado y gafas con montura dorada miró desde el monitor de su computadora mientras Marvin lo miraba. Bob, me gustaría que conocieras a uno de nuestros candidatos a decano, Dan Amor. Dan, este es Bob Wiener, nuestro Director de Recursos Humanos y también nuestro Director de Colocación. Bob se levantó y extendió su mano hacia Dan. “Encantado de conocerte, Dan”.

“Del mismo modo”, respondió Dan estrechando la mano de Bob.

“Somos una operación pequeña, así que Bob cumple una doble función. Somos muy afortunados en tenerlo “, dijo Marvin, sonriendo beatíficamente.

“¡El doble de trabajo con la mitad del salario, esa es la regla de PEMTI!” Bob respondió como si recitara un tintineo, riendo y haciendo momentáneamente que la sonrisa de Marvin sedesvaneciera, solo para regresar rápida y brillantemente como cuando el sol emerge detrás de una nube para rápidamente volver a extenderse sobre un campo de bonitas amapolas rojas.

“Es como un niño”, dijo Marvin. “Pero él es el mejor recurso para nuestros graduados, la mayoría de los cuales deben sus empleos a su arduo trabajo y muchos contactos”. Esa fue una declaración verdadera. Y a Dan inmediatamente le cayó bien el hombre. Al igual Marvin, que le parecía una persona genuinamente agradable.

“Ese soy yo”, intervino Bob, “Extraordinario vendedor de personas”. Volvió a reír con buen humor mientras Marvin le sonreía. “Espero que tengamos la oportunidad de trabajar juntos, Dan”, agregó Bob. “¡Buena suerte!”

“Gracias, Bob. Fue muy agradable conocerte. Y eso también espero”.

Con eso, Bob regresó a su escritorio y Marvin llevó a Dan hacia el área de recepción a las puertas batientes dobles estilo hospital con las palabras “A Las Aulas” estampadas en letras negras sobre la pequeña ventana de ambas puertas. Pasaron a través de un pasillo largo y bastante estrecho con puertas con ventanas y ventanas enormes que le daban al lugar el aspecto de un acuario, o las grandes exhibiciones de pulpos gigantes sobre cachalotes y dioramas de tamaño natural de humanos prehistóricos cazando, construyendo chozas de hierba o simplemente luciendo estar perdidos en medio de pastizales altos en el Museo Metropolitano de Historia Natural.

“Tenemos suerte de que las clases estén en sesión en este momento, por lo que podemos observar a la facultad y los estudiantes sin el alboroto del cambio de clase”, dijo Marvin. “A la izquierda está nuestro laboratorio de capacitación de asistentes de enfermería. Se detuvieron junto a la gran ventana y observaron a una docena de estudiantes practicando cateterismo en maniquíes de práctica masculinos y femeninos: maniquíes parciales anatómicamente correctos de torsos inferiores cortados en la cintura y aproximadamente unos 30 centímetros por encima de cada rodilla, lo que los convierte en una herramienta de práctica espantosa pero rentable. Dan hizo una mueca visiblemente mientras un estudiante practicaba la inserción de un tubo de plástico en el pene anatómicamente correcto del maniquí masculino bajo la guía de la instructora de enfermería. Todos llevaban batas blancas de laboratorio y varios miraron sonriendo al notar a los observadores. Marvin luego siguió adelante.

“A la derecha, verás nuestro laboratorio de electrónica”. Se detuvieron junto a la siguiente ventana para ver a unos veinte estudiantes dando vueltas alrededor de una gran mesa, soldando componentes mientras un distinguido caballero alto y delgado con un traje de oscuro luciendo una barba cuidadosamente recortada daba clase, señalando una pizarra con una placa de circuito. “Están construyendo una fuente de alimentación regulada que alimenta un motor de DC”, dijo Dan sonriendo.

“¿Cómo sabes eso?” Marvin preguntó, perplejo.

“El diagrama en la pizarra muestra un transformador reductor y condensadores duales conectados a un motor de corriente directa”. Dijo Dan. “Pueden estar haciendo un molino personal o un proyecto similar. Espero que enrollen sus propias bobinas para el motor y hayan creado su propio circuito de placa de pruebas, de lo contrario no es una gran experiencia de aprendizaje”, agregó Dan con una sonrisa.

“No tengo ni idea. Pero el Sr. Singh es un excelente ingeniero eléctrico y uno de nuestros mejores maestros. Estoy seguro de que están sacando mucho provecho de la lección”.

“Tal vez sea una fuente de alimentación para una computadora con un ventilador de enfriamiento. Sí, eso me suena mejor. Una buena manera de introducirlos a la electricidad o a la reparación básica de computadoras. ¿Es eso lo que hacen aquí?”

“Capacitamos a técnicos electrónicos que pueden trabajar en la tecnología emergente de computadoras personales, así como en la reparación de productos electrónicos básicos. Son técnicos generalistas”, respondió Marvin.

“¿Dónde consiguen trabajo?”

“Bob puede responder esas preguntas en detalle en su debido tiempo. Pero creo que coloca a estos graduados en empresas de ensamblaje electrónico y, más recientemente, en las industrias emergentes de fabricación y reparación de computadoras. Ha podido colocar a casi todos los graduados de este programa hasta la fecha, al igual que nuestros estudiantes de asistente de enfermería, ya que ambos son campos de crecimiento”.

“¿Cuánto duran esos programas? ”

“Ambos duran 12 meses”, respondió Marvin.

“¿Pueden obtener capacitación laboral real que conduzca a buenos empleos en solo un año?”

“Seguro que pueden. Y califican para préstamos estudiantiles federales y subvenciones TAP y PEL, por lo que es una inversión asequible para ellos”, dijo Marvin, y agregó: “Las aulas restantes son aulas tradicionales, laboratorios de mecanografía y laboratorios de computación”.

Continuaron pasando por varias aulas, deteniéndose brevemente para ver a los estudiantes escuchando conferencias sobre inglés de negocios, contabilidad, matemáticas comerciales, y finanzas comerciales y personales. Cada sala tenía aproximadamente 30-40 estudiantes. Luego pasaron por dos laboratorios de mecanografía con máquinas de escribir I.B.M. Selectric, la máquina de escribir comercial preferida de su época, y dos laboratorios de computadoras Apple IIe. Incluso en 1987, estos no eran el estado de la técnica. Dan no pudo evitar preguntar: “¿Por qué estáis usando las computadoras Apple IIe más antiguas en lugar de las nuevas computadoras Mac o IBM PC?”

“Creemos que realmente no importa qué plataforma usen los estudiantes para aprender las habilidades básicas de procesamiento de textos, hojas de cálculo o administración de bases de datos, o para practicar la mecanografía en una computadora. No estamos capacitando a estudiantes que conocen WordStar, DataStar o Lotus 1-2-3, sino a estudiantes que están familiarizados con los conceptos básicos de procesamiento de textos, hojas de cálculo y bases de datos para que puedan ser entrenados fácilmente en cualquier software actual o del futuro de estos programas por sus empleadores. No importa qué plataformas surjan, los estudiantes podrán adaptarse porque conocen los conceptos básicos. En un mundo donde el empleado promedio no sabe cómo encender una computadora, nuestros graduados tienen una ventaja real porque están familiarizados con los conceptos básicos”. Eso parecía cuestionable para Dan, quien recientemente había construido su propia primera computadora compatible con IBM-PC a partir de partes y aprendió por sí mismo PC-DOS, WordStar, DataStar, Lotus 1-2-3 y WordPerfect sin el beneficio de la capacitación formal o manuales fáciles de usar. Conocer los conceptos básicos era importante cuando las computadoras PC y Apple aún estaban en su infancia. Pero los estudiantes también deben saber cómo usar el software de aplicación más actual utilizado en los negocios para ser verdaderamente atractivos para los empleadores, pensó el. Word Perfect para DOS había superado a WordStar ya que el procesador de textos para MS-DOS de Microsoft aún no se había desarrollado. La Mac estaba en su infancia y aún no se usaba generalmente en los negocios, y mucho menos las computadoras Apple II más antiguas. Dan no quería presionar el tema. Sin embargo, si le ofrecieran el trabajo, eso es algo que trabajaría inmediatamente para cambiar.

“Nuestros estudiantes aprenden más que es útil en el mundo de los negocios en seis a doce meses con nosotros que en cualquier título universitario de cuatro años”, continuó Marvin. “El programa de especialistas en consultorios computarizados es muy popular y también es el más rentable”.

“¿Ofrecen algún programa de corta duración para capacitar a los estudiantes en programas o plataformas específicas, como WordPerfect y Lotus 1-2-3?”

“No, no en este momento. Pero eso es algo a lo que sin duda estaríamos abiertos a considerar en el futuro. No estamos encerrados en el plan de estudios”.

“Eso un alivio”, pensó Dan. Ciertamente había margen de mejora solo por lo que pudo ver en este breve recorrido. “¿Cuántos profesores de tiempo completo tenéis en el personal en este momento?” Dan preguntó mientras continuaban caminando y observando cada aula en turno.

“Catorce”, respondió Marvin. “Y estamos orgullosos de decir que todos nuestros profesores son de tiempo completo, no tenemos adjuntos aquí“. Eso sorprendió a Dan, y lo tomó como una buena señal.

Cuando la gira llegó a su fin, Marvin acompañó a Dan de regreso al área de recepción, donde le estrechó la mano y le aseguró que estaría en contacto dentro de una semana, ya sea que le ofrecieran el trabajo o no. Dan le dio las gracias y se fue, animado por las posibilidades de una nueva carrera, y pensando que tenía una excelente oportunidad de que le ofrecieran el trabajo en un lugar donde sabía que podía marcar una diferencia real.

De camino a la estación de metro, Dan apenas podía contener su entusiasmo. El salario ofrecido fue muy decepcionante, pero la oportunidad de cambiar la vida de los estudiantes para mejor le atraía enormemente. Siempre había creído en la misión tradicional de los colegios comunitarios y las escuelas técnicas de proporcionar capacitación laboral práctica. Comprender la diferencia entre Platón y Aristóteles y su impacto en toda la filosofía occidental durante más de dos mil años expande la mente, al igual que leer, ver o representar una obra de Shakespeare o pasar un glorioso semestre leyendo a los poetas románticos británicos. Una educación en artes liberales es crucial para cualquier profesional completo y puede expandir la mente y aumentar el aprecio a la vida en general de maneras que son imposibles de cuantificar. Pero los cursos introductorios sobre literatura estadounidense, sociología, poesía, apreciación musical y arqueología no pondrán comida en la mesa. Para personas quienes, ya sea por falta de interés, falta de capacidad o falta de fondos, no pueden completar cuatro o más años de universidad y deben obtener habilidades comercializables que les permitan proporcionar lo esencial de la vida para ellos y sus familias, un título de artes liberales, especialmente un título de dos años, es tan útil como los dientes a un pollo. Por otro lado, aprender habilidades de oficina, contabilidad básica, comunicaciones comerciales, matemáticas comerciales y software de aplicación utilizado en los negocios puede ayudar a alguien a obtener un buen puesto de apoyo de oficina en un período de tiempo relativamente corto, dos años o menos. Del mismo modo, aprender un oficio como plomero, electricista, conductor de camión, peluquero, carpintero, albañil, soldador, mecánico de automóviles y cualquier número de otros empleos prácticos pueden proporcionar un excelente salario y la opción de abrir un negocio propio si uno así lo desea. Y estos oficios se pueden adquirir en dos años o menos y pueden proporcionar sueldos de hasta $ 100 por hora, incluso a técnicos recién acuñados. Dan sabía esto porque tenía un primo que hoy habría sido diagnosticado con TDA que luchó con el absentismo escolar y graves problemas de comportamiento durante gran parte de sus años escolares y más allá, y, aunque tenía pocas habilidades de lectura y escritura, siempre se ganó bien la vida gracias a su capacitación práctica que le permitió tener más trabajo del que podría manejar como contratista privado trabajando para sí mismo. Dan quería dar a los demás una oportunidad similar de adquirir una buena vida de trabajo honesto y bien remunerado que podría cambiar dramáticamente vidas para mejor. Y estaba encantado en la perspectiva de perseguir una carrera que le permitiera facilitar esa oportunidad para otros.